Cómo mantener conversaciones de calidad con nuestros equipos

La gestión de personas conlleva multitud de acciones distintas, pero una de las más importantes y que más dificultades nos causa (por diferentes motivos como falta de tiempo, por tener otras prioridades -o creer que tenemos otras prioridades-, ...) es la de dedicarles tiempo de calidad. ¿Qué podemos hacer para mejorar la comunicación con nuestros equipos?.

Es fundamental el que podamos encontrar el tiempo necesario para 'olvidarnos' de ese día a día que tanto tiempo y energía nos consume, y dedicar el tiempo de calidad suficiente a las personas que están a nuestro alrededor. Para ello, yo sigo las siguientes consideraciones prácticas:

• No tengamos miedo a las interrupciones, pueden ser una estupenda forma de obtener información de calidad y de acercarnos a las personas (y me refiero a 'acercarnos' realmente). Bien gestionadas, son una ayuda más que un obstáculo.

• Cuando hablo de 'tiempo de calidad', me refiero a dedicarles tiempo 'de verdad', y no necesariamente cantidad. Debemos estar centrados 100 por 100 en la persona con la que estamos en ese momento, evitando en la medida de lo posible las distracciones (ordenador, teléfono, ...); en otras palabras, debemos estar presentes; si no es así, no sólo no estaremos pendientes de la persona con la que 'hablamos', sino que ésta se dará cuenta de ello, lo cual no será nada bueno...

• Hay que aprovechar estos momentos, no huir de ellos. Si pueden agendarse con la suficiente antelación, mejor; si no, no pasa nada por que surjan espontáneamente tomando un café o en cualquier otra situación.

• Por experiencia propia, los mejores resultados se dan cuando utilizamos preguntas (mostramos interés hacia ell@s...) y también cuando les contamos cosas, es decir, compartimos con ellos información, lo que hace que se sientan mucho mejor y ayuda a que se abran aún más si cabe.

• Importante dejarles hablar, no interrumpirles, preguntarles, demostrar interés por lo que nos cuentan, no juzgarles, ...

Con todo esto conseguimos:

• Confianza entre ambas personas. No hay nada como una buena conversación abierta para lograr generar un clima de confianza que, si conseguimos mantenerlo en el futuro, nos dará muy buenos frutos.

• Vencemos resistencias que puedan existir o, como mínimo, logramos identificarlas y trabajar sobre ellas.

• A menudo cambia una primera impresión inicial negativa que podamos tener sobre una personas.

Reflexión:

• ¿Cuándo ha sido la última conversación de calidad que has tenido con alguna persona de tu equipo?

• ¿Ha sido realmente una conversación de 'calidad'?